Es natural tenerle miedo, y decir que no nos asusta para dárnosla de valientes, lo cierto es que lo difícil de la muerte no es para el fallecido si no para los que se quedan a seguir viviendo. Cierto, que deja una desolación, coraje, tristeza, desesperanza, dolor, angustia, ira, medo, soledad, horas que parecen eternas, y unos ojos lloroso. Si la muerte un placer, y al mismo tiempo un hueco en un corazón doloroso.
Que triste la muerte para los que hemos perdido a una persona, pero mas triste es tener a la persona caminando, comiendo, defecando, hablando y aun así muerto, ya que perdió las ganas de vivir, perdió su chispa, ese brillo en los ojos y esa hermosa sonrisa.
Pregúntate, ¿de verdad, estoy vivo o estoy sobreviviendo? o ¿definitivamente soy un muerto viviente, que solo sabe que esta vivo por que tiene pulso, late su corazón y respira? si tu respuesta es estoy sobreviviendo o soy un muerto viviente, detente, analista el camino recorrido de tu vida y cambia eso que te esta matando, si para eso tienes que alejarte de esas personas que te lastiman hazlo, si necesitas cambiar de ciudad y comenzar de nuevo hazlo, haz lo necesario para volver a la vida.
Si es natural tenerle miedo a la muerte, pero mas miedo ten, de seguir respirando y no disfrutar el regalo tan hermoso de la vida, deja que la muerte llegue naturalmente, no le tengas miedo, mejor disfruta el camino, mientras llegas ese momento, date un soplo de vida, ama, vive y cáete una que otra vez, levántate y sigue caminando, para cuando llegue, digas:
"Muerte dulce placer para un cuerpo cansado y magullado".
